Este miércoles se difundió, por la Comisión de árbitros de la Asociación Paraguaya de Fútbol, los análisis arbitrales de la controvertida jugada que debió ser sancionada con tarjeta roja y, por ende, la expulsión de Rubén Darío Ríos, sobre Robert Piris Da Motta, en el encuentro por la fecha 16 entre Nacional vs. Cerro Porteño, que terminó en un empate.
El muy atrasado informe señala que la violenta falta debió ser revisada por el VAR dónde estaba el nuevo «ciego» Fernando López, en campo estuvo el muy cuestionado José Méndez, el juez en cuestión lleva varios partidos perjudicando las chances del conjunto azulgrana por lo que no se entiende su designación en un juego casi definitivo del equipo, nadie en barrio Obrero olvida la expulsión de tres jugadores capitales de Cerro Porteño ante Libertad en la penúltima fecha del Apertura de este año, cuando el juego no estaba aún indefinido, con esa expulsiones finalmente el equipo gumarelo se impuso con un pírrico 1-0.
El informe de la comisión arbitral llega cuando los ánimos de los seguidores del ciclón están más calmos con respeto al perjuicio ocasionado por los árbitros al onceno más popular del Paraguay, pero la leche está derramada y nadie le podrá resarcir el perjuicio ocasionado por los ineptos (como mínimo) árbitros al conjunto dirigido por Francisco Arce.
La comisión directiva del ciclón, encabezada por el Dr. Juan José Zapag, debe presentar un pedido de dura suspensión para los involucrados en tamaño perjuicio para los intereses de la institución a su cargo, de lo contrario José Méndez y el «ciego» Fernando López seguirán haciendo barrabasadas en los partidos del torneo más importante de la APF.