El atacante boliviano, al servicio del Ciclón de barrio Obrero, manifestó en conferencia de prensa en acto de recepción de una camioneta eléctrica de alta gama de parte de una empresa automovilística, todo el drama que le tocó vivir a raíz del fallecimiento de su padre y el dolor que tuvo a consecuencia de la larga enfermedad de su Papá.
Don Mauro partió a la eternidad el lunes pasado y a consecuencia de la noticia, el «Flecheiro» abandonó la concentración del equipo Azulgrana para asistir al funeral del hombre que le enseñó a jugar al fútbol, según manifestó el atacante.
«Todo lo que he vivido desde que llegue a Paraguay ha sido muy difícil con mi Papá enfermo. Creo que mis compañeros se dieron cuenta, «Chiqui» también. Parecía que yo tenía un peso enorme y eso me estaba lastimando mucho, en el tema futbolístico también», vertió el futbolista.
“O Flecheiro” continuo exponiendo ante la prensa pormenores de todo lo que pasó en la entidad azulgrana con él. «Los compañeros me dieron una mano y fuerzas para poder seguir, yo no se qué hubiera pasado si no fuera así. Hoy me siento más adaptado gracias a mis compañeros. Espero que ese compañerismo siga así. Es un momento diferente, de despedida de un ser humano que me enseñó todo. Estoy pasando por un momento muy difícil todavía», agregó.
Por último, sobre el abrazo y posterior festejo de los compañeros tras su conquista ante los «repolleros», Marcelo señaló lo siguiente: «Mi esposa vio el video del gol y se ve que todo el grupo está unido, abrasándome como si fuera mi familia. Como que ellos sintieron el momento que yo estaba pasando. Es muy lindo saber que hay compañeros que son solidarios, nos deja muy feliz para seguir».