¿Quedará así nomás?

by Diario Cerrista

El ciclón recibió a Olimpia en la Nueva Olla en un nueva edición del superclásico paraguayo, el encuentro, correspondiente a la sexta fecha del Torneo Clausura, terminó empatado 1-1, goles de Hugo Fernández y Diego Churín.

En cuanto al partido, no fue nada bueno, pero el que estuvo con las luces totalmente apagadas fue el árbitro Derlis López, que se mostró exigente en demasía con los jugadores dueños de casa y extremamente complaciente con la visita.

El conjunto dirigido por Diego Gavilán terminó con 9 hombres el encuentro por la expulsión de su zaguero central Jorge Morel y la gravísima lesión del prometedor defensor Rodrigo Melgarejo luego del criminal planchazo de Fernando Cardozo que vio todo el estadio, pero no así el inepto y sospechoso arbitro ni los encargados del VAR.

Una vez finalizado el duelo, el presidente de la entidad, Juan José Zapag, tronó contra el inútil (como mínimo) Derlis López: «El árbitro jugando para el Olimpia. Les felicito a todos los olimpistas, cocinan en Copa y en campeonato. Es una vergüenza, le partió la pierna a un jugador y ni siquiera amarilla, es un chiste», disparó el mandamás del ciclón.

El pueblo de Cerro Porteño está harto de la injusticias arbitrales que tienen siempre la osadía y el descaro de venir a robar al equipo del pueblo en su propia casa. El hincha pide acciones concretas y protestas a donde sea y corresponda contra el repugnante robo arbitral, la directiva tiene que pedir una ejemplar sanción para López y todo el equipo VAR, así como lo ha hecho el club Guaraní, que fue menos perjudicado, pero se hizo sentir luego de ser robado también ante Olimpia.

Probablemente Cardozo ni siquiera será llamado por el tribunal disciplinario y continuará feliz su carrera; en cambio, Rodrigo Melgarejo ya se perdió este año deportivo y parte del otro por la rotura de ligamento cruzado anterior, rotura meniscal y edema óseo en fémur y tibia.

Para ser justos, el jugador de Olimpia debió ser expulsado de manera inmediata, aun si no tuviera la intención de perjudicar al colega fue extremamente imprudente al atropello, de ejemplo vale lo que aconteció con el estelar lateral Marcelo de Fluminense, que fue expulsado aun cuando no hubo la mínima intención de lastimar al jugador de Argentinos Juniors en el encuentro de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores.